Terminamos esta semana leyendo Eclesiastes 5:1-7
v1: En la Biblia Hebrea este es el último verso en el capítulo 4. (o sea, Eclesiastes 4:17).
- Guarda tu pie: Cuida tus pies.
- Casa de Di-s: Esta es una declaración rara porque Salomón rara vez habla de Di-s, pero de vez en cuando, en este libro, deja caer pequeños indicios de espiritualidad.
Nota: Este es un versículo de advertencia. Salomón cerró el capítulo 4 hablando de la restricción. Aquí, nuevamente, está insinuando la necesidad de mostrar moderación.
- Acérquense más para oír que para dar el sacrificio de los necios: Algunas personas van a un lugar de adoración por un sentido del deber. Escriben un cheque, pagan lo que creen que les corresponde y no pueden esperar la hora de salir de allí. Se trata de hacer el sacrificio. La adoración, sin embargo, se trata de oir de Di-s, escucharlo a Él, seguir Sus instrucciones.
- No saben que hacen mal: Cuando damos por obligación (religiosidad) estamos dando por la razón equivocada. Esto es visto como malo a los ojos de Di-s. Di-s no te necesita a ti ni a mí. Él no necesita las cosas que Él puso en nuestras manos. Sin embargo, Él nos da la oportunidad de participar dentro de Su Reino, para nuestro mejoramiento, no para el Suyo (Él no necesita nada de nosotros).
Nota: En este quinto capítulo, Salomón, de forma lenta pero segura, comienza a reconocer la presencia y el gobierno de Di-s. También está empezando a ver las cosas desde la perspectiva de Di-s.
v2: No te des prisa con tu boca… tu corazón (pensamientos): Santiago 1:19. Necesitamos ser muy conscientes de la forma en que entramos en la Presencia de Di-s (es decir, no seamos irreflexivos). Necesitamos decir menos y escuchar más… para estar quietos ante Él. Ten en cuenta que, a menudo, cuando todavía estamos ante Di-s, nuestras mentes son propensas a ser atacadas por el enemigo, ya que él quiere disuadirnos de escuchar a Di-s: nuestras mentes vagan aquí, allá y en todas partes. Necesitamos crecer en nuestra habilidad de escuchar a Di-s. Necesitamos preparar nuestro corazón para escucharlo alabándolo. Se necesita concentración. El ayuno también puede ser una herramienta poderosa para ayudarnos en la oración. Muchas veces, bíblicamente, cuando se menciona el ayuno, se acompaña de oración. El propósito del ayuno es que vaciemos o debilitemos nuestro cuerpo físico, de modo que comencemos a buscar asistencia espiritual, que proviene, por supuesto, solo de la revelación de Di-s.
- Di-s está en el cielo y tú sobre la tierra: Di-s habita en los cielos de una manera única. Habitamos sobre la tierra. Hay una separación entre nosotros y Di-s. Debido a que Di-s es muy distinto a nosotros, debemos pensar detenidamente en lo que vocalizamos ante Él.
v3: De la mucha ocupación viene el sueño: A medida que experimentamos más y más del mundo, esto impactará nuestros deseos o sueños. Salomón nos está advirtiendo sobre el peligro (espiritual) de basar nuestras vidas en lo que experimentamos en este mundo. Una abundancia de experiencia en este mundo nos va a llevar a tener una multiplicidad de deseos o un enfoque basado en lo que el mundo está revelando. Tenemos que tener cuidado con esto. ¿Son la mayoría de nuestras actividades espiritualmente significativas o de naturaleza frívola?
- Multitud de palabras: Cuanto más hable alguien (simplemente dejando que las cosas salgan de su boca) más tonterías van a pronunciar. Debemos ser muy, muy cuidadosos con lo que vamos a decir, y debemos limitar lo que sale de nuestra boca. También debemos tener mucho cuidado cuando llevamos a Di-s a una conversación, que no le atribuyamos palabras que nunca dijo (p. ej.: “Siento que Di-s dice…”, etc.)
v4-5: Un voto ante Di-s es un asunto serio (Mateo 5:33-37). Hay una consecuencia para cualquier voto que hagamos. No todos los votos son tontos (p. ej., el voto de matrimonio), pero los que se hacen precipitadamente, por lo general, son tontos. Podemos pedirle a Di-s que nos perdone por los votos precipitados que hemos hecho, y aunque se nos perdone por hacerlos, eso no significa que seamos liberados automáticamente de nuestra obligación de cumplirlos (Jueces 11:29-40 – este fue un voto tonto). Lo que Salomón nos está comunicando aquí es que debemos ser personas íntegras.
v6: No dejes que tu boca te haga pecar: Esto está hablando de sentirse obligado a hacer (físicamente, en la carne) lo que tu boca ha dicho que harás.
- Ángel: Aquel que te está guiando, recordando, convenciéndote para que cumplas el voto que hiciste.
- Fue ignorancia: Dijiste algo precipitadamente y no tenías intención de llevarlo a cabo (…y pensándolo bien…).
- Di-s se enoje a causa de tu voz: Di-s es santo. Cuando decimos algo que resulta ser engañoso (engañoso intencionalmente o no, decimos algo que no tenemos intención de llevar a cabo), Di-s nos hará responsables. Aprende este principio: todo lo que salga de nuestra boca tendrá un juicio. Tenemos que ser serios con nuestro discurso. Tenemos que hacer una pausa, detenernos y pensar detenidamente en las cosas que decimos. Con demasiada frecuencia dejamos que las emociones dicten nuestras palabras en lugar del Espíritu Santo. Tenemos que aprender a poner un freno a nuestras lenguas.
v7: Muchos sueños y muchas palabras conducen a la vanidad, a la futilidad, a menos que estemos soñando los sueños de Di-s para nuestras vidas o hablando las palabras que Él nos da para decir. Si nuestros propios sueños y deseos son la base de nuestra vida, vamos a vivir en la frivolidad y la futilidad. Necesitamos limitarnos a aquellas cosas que sabemos que Di-s está poniendo sobre nosotros.
- Teme a Di-s: Una declaración simple pero profunda. Temer a Di-s significa darle prioridad en todo. No vamos a lugares donde Di-s no querría que fuéramos. No decimos cosas que Di-s no quisiera que dijéramos. Cuando demostremos el temor del Señ-r, será una fuente de revelación. Temiéndole a Él es cómo encontramos Su voluntad para nuestras vidas, en lugar de ser engañados por sueños sin sentido y por lo que pensamos que debería ser nuestro destino.