Nuestra última lectura de esta semana es 2 Timoteo 2:20-26.
v20: Grande: Genial.
- En una casa grande: Pablo está comparando el mundo en el que vivimos con una casa grande.
- Unos son para usos honrosos, y otros para usos viles: Estos vasos tienen dos propósitos distintos: algunos honran la voluntad de Di-s y otros están en contra de la voluntad de Di-s.
v21: Si alguno se limpia de estas cosas: Sólo podemos hacer esto a través de la obra del Espíritu Santo en nuestras vidas.
- De estas cosas: La madera y el barro. Aquellas cosas que son falsas y que no han dado en el blanco. Estos se refieren a las cosas infructuosas de la vida, las cosas vanas e inútiles.
- Será instrumento para honra: Queremos ser aquellos que se comprometen a hacer las cosas según la voluntad de Di-s.
- Santificado, útil: Así estamos llamados a vivir en este mundo. Ser santificado y útil significa ser llamado a vivir una vida con un propósito divino.
- Dispuesto para toda buena obra: Como creyentes hemos sido llamados a ser personas que hacen buenas obras. No hacemos buenas obras para ganarnos la salvación. Las buenas obras son fruto de la salvación. Dan testimonio del hecho de que en verdad somos salvos.
v22: Nota: Hay un proceso mediante el cual nos convertimos en individuos que hacen buenas obras. Este proceso implica un cambio.
- Pasiones juveniles: Es necesario alejarse de la inmadurez espiritual.
- Sigue: Perseguir algo diligentemente significa que lo perseguimos con un compromiso total, siendo apasionados, sin hacer concesiones, sin desanimarnos, sin desanimarnos, sin prestar atención a nada más.
- Sigue la justicia, la fe, el amor y la paz: Huimos de los deseos juveniles (inmadurez espiritual) persiguiendo estas cosas.
- De corazón limpio: Un corazón que ha sido limpiado y preparado para el servicio a Di-s. Cuando buscamos las cosas mencionadas anteriormente (rectitud, fe, etc.), tienen un efecto purificador en nuestros corazones (nuestras mentes, nuestros pensamientos).
v23: Pero desecha las cuestiones necias e insensatas (no entrenadas): El enemigo ama la contienda y el conflicto. Él siempre trata de generar discusiones en las familias, entre los creyentes en las congregaciones locales, en las organizaciones, etc. Si alguien es tonto, no debemos responderle por su necedad. Asimismo, si alguien no está entrenado en las cosas de Di-s (no es discípulo del Mesías ni quiere serlo) debemos evitar disputar con él. A las personas tontas e enseñables les gustan las luchas. Necesitamos negarnos a ser parte de esto.
- Sabiendo que engendran contiendas: El conflicto produce mayor conflicto.
v24: Porque el siervo del Señ-r no debe ser contencioso: No tenemos que ser dotados para riña. Somos personas llamadas para exponer la verdad (a enseñar la verdad). Si alguien no quiere oírlo, es culpa suya. Una vez que hemos expuesto la verdad, no necesitamos defenderla ni luchar por ella. Aquellos que son tontos e enseñables intentarán luchar contra la verdad, pero no debemos involucrarnos ni entrar en conflicto con ellos por ella.
- (Sufrido): Esta no es la palabra para ser “paciente”. Esta es una palabra que significa soportar o llevar el mal. Con frecuencia a lo largo de sus cartas a Timoteo, Pablo ha aludido al hecho de que como creyentes vamos a sufrir el mal (cosas que van en contra de la voluntad de Di-s). El mal (sufrimiento, persecución, tribulación, etc.) se nos impondrá y tenemos que soportarlo/superarlo para poder tener la victoria.
v25: (Mansedumbre): Esta no es la palabra para humildad, sino para ser gentil, con un espíritu tranquilo, sin tratar con dureza a los demás. Como líderes, hay numerosas cosas en las que se nos advierte que no nos involucremos. Entrar en conflictos y debates con la gente no es un buen uso de nuestro tiempo. El conflicto siembra semillas de división y disensión. Los líderes no deben quedar atrapados en un conflicto tras otro.
- Corrija: (literalmente: Entrenamiento).Esta es una palabra para tutoría. Cuando los niños son capacitados (educados), crecen y maduran. El deseo de Pablo es que Timoteo (líderes) capacite, discípulo o eduque a aquellos que están en oposición a las cosas de Di-s, para que aquellos que no conocen nada mejor tengan la oportunidad de aprender, madurar y crecer.
- Quizá Di-s les conceda que se arrepientan: Esta es la esperanza. Cuando los líderes ayudan a poner en orden (rectificar) la teología, la doctrina, la verdad, etc. en las vidas de aquellos que son contrarios, hay una esperanza de que Di-s les conceda el arrepentimiento para que puedan llegar al conocimiento de la verdad.
- Para conocer la verdad: Esto viene después del arrepentimiento. No tendremos conocimiento de la verdad hasta que nos hayamos apartado del pecado. Por eso es tan vital que afirmemos los estándares morales o éticos de Di-s: todo lo que Él establece en la ley. La ley no es un instrumento de salvación, pero nos enseña las normas (expectativas) de Di-s en cuanto a moralidad, conducta, ética, justicia, etc. Sólo cuando abrazamos las normas de Di-s, afirmándolas en nuestras vidas, podemos tendrá conocimiento de la verdad. La ley de Di-s nos revela qué es el comportamiento justo e injusto. No podemos practicar el arrepentimiento si no entendemos que constituye un comportamiento injusto.
v26: (Literalmente) “Y escapen del lazo del diablo, en que están cautivos a voluntad de él”.
Nota: Algo para tener en cuenta: muchas Biblias agregan palabras a un texto para tratar de ayudarnos a comprender lo que dice el versículo. A menudo estas palabras añadidas están en cursiva en nuestras Biblias.
- Escapen: Volver a. Esto se refiere a aquellos que vuelven a una forma correcta de pensar.
- Del lazo: Mente sobria.
- (Escapando): Esto no está escrito en el texto original, pero está implícito. Cuando hayamos recuperado una manera apropiada de pensar, seremos capaces de reconocer las trampas del diablo.
- En que están cautivos a voluntad de él: Las discusiones, las contiendas, los conflictos, las falsas enseñanzas, la falta de capacitación adecuada, etc., pueden llevar a que las personas queden atrapadas en las trampas de Satanás, siendo atrapadas por él. Cuando estamos cautivos del diablo, nos convertimos en personas que hacen la voluntad del diablo en lugar de hacer la voluntad del Señ-r. Es necesario volver a la sensatez para que podamos reconocer esta trampa en nuestras vidas y poder escapar de ella. Regresamos a la sensatez al abrazar la verdad de Di-s.