Comenzamos esta semana leyendo Efesios 2:14-18
v14: Nuestra: Pablo está hablando aquí a dos grupos: los que están lejos (es decir, los incircuncisos) y los que están cerca (los circuncidados). Es importante notar que el hecho de que el pueblo judío fuera considerado “cercano” a Di-s no significaba que tuvieran esperanza si se los dejaba en la condición en la que se encontraban. La circuncisión no los salvó. Lo que sí tenía el pueblo judío, que le daba una ventaja sobre los gentiles, era revelación. Tenían la Palabra de Di-s (Romanos 3:1-2). Las personas que tienen una revelación de Di-s (es decir, aquellos a quienes se les manifiesta la verdad de Di-s) son capaces de responder y moverse en la dirección de Di-s. Cuando respondemos a Di-s y nos movemos en Su dirección, Él se pone a trabajar en nuestras vidas para producir un cambio, para hacernos nuevos.
- Que de ambos pueblos hizo uno: ‘ Ambos’ se refiere a judío y gentil.
- Derribando la pared intermedia de separación: En el Mesías – al estar EN Su carne / EN Su cuerpo – la enemistad entre el hombre y Di-s se rompe. Una consecuencia de esto es que también hay una restauración en las relaciones humanas cuando estamos EN el Mesías – una ruptura de la enemistad entre los seres humanos (judíos y gentiles). Sólo cuando un judío está conectado con Di-s y un gentil está conectado con Di-s va a haber paz entre ellos. Sin embargo, primero y principal, la paz que se enfatiza aquí es la paz entre el hombre y Di-s.
Nota: En los manuscritos antiguos no hay división de versículos. Es difícil saber (y discutible) dónde termina el versículo 14 y dónde comienza el versículo 15.
v15: La ley de los mandamientos expresados en ordenanzas: Aquí Pablo está usando el término “ley” como una doctrina, como una regla o como un estándar. Pablo no está hablando aquí de que el Mesías aboliera la ley/los mandamientos. El Mesías no vino a abolir/destruir la ley, sino que vino a cumplirla (Mateo 5:17). Podemos entender de qué está hablando Pablo aquí al mirar Romanos 7:4-6. La ley tiene un efecto sobre nosotros. Cuando estamos en la carne y escuchamos el mandato de Di-s, ese mandato agita la rebelión en nuestros corazones y nos hace hacer, o querer hacer, exactamente lo opuesto de lo que se nos ha dicho (esto se ve muy claramente en el comportamiento de un niño. Cuando se le dice que no toque algo, el niño lo toca) – esto es cierto para judíos o gentiles. Lo que Pablo está diciendo es que cuando estamos EN el Mesías, Di-s pone nuestros deseos en alineación con Sus deseos. EN el Mesías, cuando se nos ordena no hacer algo, la rebelión ya no surge dentro de nosotros, sino que deseamos no hacer esa cosa, pues comenzamos a desear vivir de una manera que agrade a Di-s.
- Crear: Esto está escrito en modo subjuntivo. El modo subjuntivo es el modo de posibilidad o el modo de condición. Esta puede ser la realidad en nuestras vidas, pero solo es una realidad con la condición de que estemos EN el Mesías.
- Un nuevo hombre: En el Mesías, los dos (judío y gentil) se convierten en UN nuevo hombre. Esto tiene implicaciones muy importantes. Esto significa que, EN el Mesías, judío y gentil tienen igual acceso a Di-s. Un judío EN el Mesías ya no tiene ventaja sobre un gentil que está EN el Mesías (Romanos 3:1-2). Tanto el judío como el gentil están ahora en una posición tal que tienen una mejor comprensión de Di-s. Ser UN nuevo hombre NO significa que haya un estilo de vida para un creyente judío que sea diferente al estilo de vida de un creyente gentil. Di-s quiere que Su verdad y justicia, bajo el liderazgo y la guía del Espíritu Santo, se apliquen a nuestras vidas. Esto no hace ninguna diferencia en si somos de ascendencia judía o no.
v16: Mediante la cruz reconciliar con Di-s a ambos en un solo cuerpo, matando en ella las enemistades: La razón principal por la que Yeshúa murió en la cruz fue para que pudiera haber paz entre el hombre y Di-s. Aunque fue un subproducto, Yeshúa NO fue a la cruz, principalmente, para que pudiera haber paz entre judíos y gentiles. Si el propósito de Yeshúa al ir a la cruz hubiera sido reconciliar al hombre con el hombre, entonces seríamos un pueblo unificado en nuestra perdición. Esto no es de lo que hablan estos versículos. Cuando estamos unificados con Di-s (el propósito principal de Yeshúa al morir en la cruz), un subproducto de eso es estar unificados y en paz con aquellos que están EN el Mesías.
v17: Anunció las buenas nuevas de paz: No se trata de una paz entre los hombres. La paz que se predica es la paz entre Di-s y el hombre.
- Vosotros que estabais lejos: los gentiles.
- Los que estaban cerca: Los judíos.
v18: Los unos y los otros tenemos entrada: judíos y gentiles.
- Un mismo Espíritu: Hay UN solo Espíritu Santo. No hay un Espíritu para los judíos y otro para los gentiles.
- Al Padre: El propósito del Mesías era hacer realidad el acceso al Padre para aquellos que anteriormente no habían tenido ningún pacto, ninguna esperanza o expectativa de las promesas de Di-s. Di-s no sólo hizo posible que los gentiles tuvieran acceso al Padre, sino que también cumplió las promesas de su pacto con Israel. Les ofreció redención por medio de su sangre.