Cultivando Tu Vida de Oración

El propósito de la Vida Inspirada Bíblicamente es animar a los Creyentes a infundir cada aspecto de sus vidas con la Verdad Bíblica. Creemos que el verdadero gozo se encuentra solo al obedecer y servir al Señ-r.

Bienvenidos a un nuevo episodio. Muchos de ustedes quizás no sepan que una de las tareas que llevo a cabo con LoveIsreal.org es que administro nuestro Equipo Global de Oración. Este es un grupo de personas de todo el mundo que se han comprometido a orar por LoveIsrael, nuestro trabajo, nuestros equipos, nuestro alcance y también algunas solicitudes de oración personales que llegan a través de nuestra oficina. Me hizo pensar que tal vez muchas personas se estén preguntando cómo mejorar su vida de oración, y solo quería darles algunos consejos hoy, que pensé que podrían ayudarles.

Estaba mirando en diferentes sitios web y descubrí que la Biblia contiene más de 200 oraciones. Muchas de las oraciones son contestadas por Di-s afirmativamente, y esas son oraciones que están en línea con Sus planes y propósitos, y también, las oraciones de personas hechas con fe, pedidas con fe. Las oraciones que fueron respondidas negativamente fueron contestadas así debido al pecado, la falta de fe, y simplemente no es la voluntad de Di-s. Entonces, estaban orando por algo fuera de Su voluntad.

Ahora, creo que una buena guía para la oración es, por ejemplo, el Padre Nuestro, y lo encontramos en el capítulo 6 de Mateo. Ahora, voy a mirar algunas de mis notas un poco, pero sabemos de Esa oración, que comienza con ‘Padre nuestro, que estás en los cielos, santificado sea Tu nombre’. Entonces, comenzamos la oración alabando a Di-s, honrando a Di-s, entendiendo que Él es el Creador del universo, y debería ser, y es digno de toda nuestra alabanza y honor, y es digno de toda la gloria.

La siguiente oración es: ‘Venga Tu reino, hágase Tu voluntad en la tierra como en el cielo’. Esto significa que estamos de acuerdo con Di-s y sus planes y propósitos, y que Él y Su voluntad son lo correcto, lo perfecto, y que queremos esa realidad del Reino de un mundo funcionando perfectamente bajo la Ley, dentro de la Ley de Di-s, y queremos, estamos de acuerdo con eso cuando nos presentamos ante Él en oración.

El siguiente, “danos hoy nuestro pan de cada día”, es para que oremos por nuestras necesidades diarias. Esta no es una oración de, quiero ser rico, quiero todas estas cosas. Es “danos hoy nuestro pan de cada día”, así que, por favor, súplenos nuestras necesidades, no todos nuestros deseos, sino nuestras necesidades de acuerdo con Tu voluntad.

Y luego dice, ‘y perdónanos nuestras ofensas como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden’. Entonces, debemos presentarnos ante Él pidiendo perdón por nuestros pecados y, de la misma manera, que tengamos un corazón para perdonar a los que pecan contra nosotros.

“No nos metas en tentación, más líbranos del mal”. Guárdanos del pecado. Queremos caminar contigo, queremos ser usados por Ti, Di-s, para Tus planes y propósitos.

Para Tu… y luego, “Porque Tuyo es el Reino, y el poder, y la gloria por siempre. Amén. Y nuevamente, terminamos con alabanza y honor, y esa palabra hebrea que tanto amo, kavod honor, porque Él es digno de todo eso, de toda alabanza, honor y gloria.

Entonces, alabamos a Di-s. Adoramos a Di-s. Le decimos que estamos de acuerdo con sus planes y propósitos. Luego nos presentamos ante Él y le pedimos nuestras peticiones, nuestras súplicas, nuestras oraciones que tenemos, ya sea intercediendo por otra persona o por nosotros mismos, y sabiendo que Él es el Padre perfecto, que Él nos dará exactamente lo que necesitamos. y que Él es nuestro proveedor. Y luego terminamos la oración agradeciéndole nuevamente y dándole toda la alabanza, el honor y la gloria.

Otra cosa que podemos hacer es leer a través de los Salmos. Muchos de los Salmos contienen oraciones. Más de 70 de ellos lo hacen. Entonces, infundir nuestras oraciones con las Escrituras es una forma de decir, Di-s, esta es Tu Palabra, esta es Tu voluntad, estoy de acuerdo con eso. Quiero servirte, quiero obedecerte. Y al orar a través de Su Palabra, esa es una forma de hacerlo.

Y finalmente, para que no se olviden de las cosas, tengo listas, ya saben, hago un seguimiento de las diferentes necesidades de oración que tiene la gente. Cuando se transmite nuestra transmisión en vivo, Midnight from Jerusalem (Medianoche desde Jerusalén), tengo un lápiz y papel para escribir cuando alguien dice algo en los comentarios. Tal vez alguien te diga, ¿puedes orar por mí? O le dices a alguien, yo oraré por ti, entonces tienes que escribir eso y recordarlo. Tienes que cumplir tu palabra. Entonces, el hacer una lista, no hay nada de malo en eso.

Finalmente, solo quería darles algunas ideas y luego solo darles un par de ejemplos de la fidelidad de Di-s hacia nosotros.

Una forma de mejorar realmente su vida de oración es establecer un tiempo específico cada día para orar. Otro es mirar a Daniel. Del libro de Daniel en el capítulo 6 vemos que dice, y lo tengo escrito, dice, ahora cuando Daniel supo que la escritura estaba firmada, se fue a su casa y, en su aposento alto, con las ventanas abiertas hacia Jerusalén, se arrodilló tres veces ese día y oró y dio gracias ante su Di-s como era su costumbre desde los primeros días. Y esa tradición, esa costumbre se continúa hoy. Dentro del judaísmo hay tres, eh, tres momentos de oración cada día.

El primero se llama Shajarit y contiene la palabra shakhar, que significa amanecer. Entonces, eso es como una oración matutina. La oración de la tarde se llama Ararvit, que viene de erev (víspera), que significa tarde (vespertina). Y la oración del medio se llama Mincha, que significa regalo. Entonces, es una oración adicional, a la mitad del día, y es muy especial porque te tomas un tiempo durante el día para orar al SEÑ-R. Creo que es realmente un momento especial. Demuestra, en mi opinión, un compromiso adicional con Di-s, que dices sabes qué, estoy apartando un tiempo a la mitad de mi día para estar a solas con Di-s y orarle y escucharle mientras me habla.

Y mientras lo piensas, la oración no es solo hablar con Di-s, decirle lo que quieres y, ya sabes, decir, ya sabes, que tú estás a cargo de todo, sino que también es escuchar. También necesitamos escuchar lo que Di-s tiene que decirnos. Él puede decir, quiero que vayas en esta dirección, quiero que vayas en esa otra dirección. Por lo tanto, es muy importante no solo orar y hablar, sino también escuchar. Una conversación no es unidireccional. Una conversación va y viene. Entonces, ese es un aspecto realmente importante.

Y solo quiero animarte a orar, para que ese sea un aspecto muy importante y significativo de tu vida para hablar con Di-s y escucharlo. Y sé que crecerás, te beneficiarás y tu fe se fortalecerá, y será una gran bendición para ti. ¡Gracias por vernos y que tengas un gran día!