Porción de la Torá: Bahar (En la Montaña) – Bejukotái (en Mis estatutos)
Lectura de la Torá: Bahar – Levitico 25:1-26:2
Bejukotái – Levitico 26:3-27:34
Lectura Profética: Bahar – Jeremias 32:6-27
Bejukotái – Jeremias 16:19-17:14
Parashá Bahar-Bejukotái
Esta semana hay una lectura doble de la Torá y Baruch ha seleccionado una porción en lugar de comentar sobre ambas porciones.
“La Libertad se Relaciona con la Obediencia a la Voluntad de Di-s”
En la lectura de la Torá de esta semana, se habla del año del Jubileo. Con respecto a este mandamiento se dice:
“Y santificaréis el año cincuenta y proclamaréis la libertad en la Tierra para todos sus habitantes…” Levitico 25:10
Solo hay un punto que quiero compartir con respecto a este versículo. El texto establece que debemos proclamar דרור “libertad”. Es muy importante que uno entienda las implicaciones únicas de esta palabra hebrea. Según el contexto, el individuo estaba obligado (en servidumbre) a servir a su acreedor. Sin embargo, cuando llegará el Año del Jubileo, debía ser puesto en libertad. ¿Por qué estaba éste obligado a servir a su acreedor? La respuesta es porque no pudo mantener su acuerdo con respecto a los términos de un préstamo. En otras palabras, su violación lo llevó a estar en cautiverio. Hay un mensaje espiritual en este tema. Debido a la violación de la palabra de Di-s por parte de Adán, nos encontramos en la esclavitud del pecado. Asimismo, debido a la provisión del Mesías por parte de HaShem, los creyentes han sido liberados de la esclavitud del pecado. El Mesías es un tipo de bendición del Jubileo.
La bendición del Jubileo se relaciona únicamente con la “libertad”. También lo es la fe en el Mesías Yeshúa. Es importante entender la naturaleza de la palabra usada en este texto. Esta “libertad” se relaciona con la obediencia a la voluntad de Dios. ¿De la misma manera que el siervo no fue puesto en libertad para que inmediatamente pudiera actuar de la misma manera que lo haría volver a la servidumbre? asimismo, los que experimentan la libertad del Mesías no están llamados a pecar, sino a usar la libertad para obedecer la palabra de Di-s. En otras palabras, la libertad que un creyente recibe de Yeshúa no debe ser usada como una oportunidad para pecar. De hecho, un verdadero creyente no deseará el pecado. Esto no significa que los creyentes nunca tengan la tentación de pecar, ni significa que nunca más lucharemos con el pecado. Significa más bien, que un creyente no tendrá como objetivo cometer pecado. La realidad del asunto es que una motivación principal para recibir la gracia de Di-s es el propósito específico de alejarse del pecado y abrazar los propósitos de Di-s.
Con esto en mente, no sorprende que uno lea en este mismo pasaje,
“Porque es un Jubileo, santo tú seréis …” Levitico 25:12
Del texto se desprende claramente que existe una relación inherente entre la libertad del Jubileo y la santidad.