El Nuestro Yo Espiritual
Publicado, agosto 15, 2021
Bienvenidos de nuevo a la Vida Inspirada Bíblicamente. Hoy estoy viniendo a ustedes desde Eilat, Israel, y al principio del video vieron algunas fotos de esta hermosa ciudad en el golfo de Eilat.
Así que, hoy vamos a hablar sobre lo último en nuestra serie acerca de cómo somos maravillosa e increíblemente hechos por Di-s. En el primer video, discutimos nuestro cuerpo físico. En el segundo video, hablamos de nuestros cerebros, nuestras mentes y lo importante que es con lo que llenamos nuestras mentes, en lo que pensamos y en lo que meditamos. Y hoy vamos a ver el aspecto espiritual, el nuestro yo espiritual y lo importante que es para nosotros hacer algunas cosas clave con el fin de crecer espiritualmente.
Antes de que comencemos, es muy importante darse cuenta de que, para tener una vida espiritual, una verdadera vida espiritual, uno debe ser un creyente en el Mesías Yeshúa, reconociendo que Él ha quitado nuestros pecados a través de Su obra en la cruz. Por lo tanto, si tú no has tenido esa experiencia de salvación, es muy importante para ti hacer eso primero. Porque conocemos ese verso muy famoso Juan 3:16,
“Porque de tal manera amó Di-s al mundo, que ha dado a Su Hijo Unigénito, para que todo aquel que en Él cree, no se pierda, más tenga vida eterna.”
Otros versículos que son muy importantes se encuentran en Juan capítulo 15 y los versículos cuatro y cinco. Lo que me gustaría compartir con ustedes es,
“Estad en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto de sí mismo, si no estuviere en la vid; así ni vosotros, si no estuviereis en mí (eso es, Mesías Yeshúa). (5) Yo soy la vid, vosotros los pámpanos: el que está en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque sin mí (sin Yeshúa) nada podéis hacer.”
Y no es hasta que tenemos el Espíritu Santo viviendo dentro de nosotros, al que recibimos cuando hacemos esa declaración de salvación al Señ-r, que entonces realmente podemos permanecer en Él y Su Espíritu permanecerá en nosotros.
También leemos en Romanos capítulo 10, versículos 9 y 10,
“Que si confesares con tu boca al Señor Jesús, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo. (10) Porque con el corazón se cree para justicia; mas con la boca se hace confesión para salud.”
Entonces, ese es el primer paso para cualquier persona antes de que él o ella pueda avanzar.
Ahora, una vez que hemos establecido esta relación con el Señ-r, ¿cómo nos comunicamos con Él? Nos comunicamos a través de la oración. La oración es tan vital para nosotros para comunicarnos con el Señ-r, pero una cosa que realmente tenemos que recordar es… cuando nos comunicamos con alguien, ¿simplemente hacemos toda la conversación y nunca escuchamos a la otra persona? No, hablamos y luego escuchamos y es muy importante para nosotros recordar esto en nuestra vida espiritual.
Cuando estamos orando al Señ-r, orando por Su dirección, orando por Su obra en nuestras vidas, tenemos que recordar que hay que estar en silencio y escucharle a Él y cómo Él se comunica con nosotros a través del Espíritu Santo. El Salm0 141 afirma en los versículos 1 y 2,
“SEÑ-R, á ti he clamado: apresúrate á mí; escucha mi voz, cuando te invocare. (2) Sea enderezada mi oración delante de ti como un perfume, el don de mis manos como la ofrenda de la tarde.”
Así que es muy importante para nosotros el comunicarnos con Di-s a través de la oración, pero de la misma manera, para que nos quedemos callados y escucharle a Él cuando nos responde.
La siguiente manera de oír del Señ-r es en Su Palabra. Nosotros necesitamos estar en Su Palabra con el fin de entender el carácter de Di-s, para entender Sus planes, no sólo para el mundo, sino también para nosotros personalmente, y para averiguar lo que son Sus expectativas para nuestras vidas, personalmente y como creyentes en general, como una comunidad de creyentes, ya que dice en Efesios 1, versiculo 17,
“Que el Dios del Señor nuestro Jesucristo , el Padre de gloria, os dé espíritu de sabiduría y de revelación para su conocimiento;”
Aprendemos de Él y tenemos más conocimiento de Él cuando estamos en Su Palabra. Por eso, les dejo un par de versículos para que tal vez los busquen más tarde y estos son: 2ª Timoteo capítulo 3, versículos 16 y 17, y luego también Efesios 1 versículo 17. Estos les pueden proveer un poco más de información.
Nosotros también necesitamos estar en oración, alabanza y adoración. Alabar y adorar el Señ-r es muy importante. Encontramos en Colosenses capítulo 3 y versículo 16 que dice,
“La palabra de Cristo habite en vosotros en abundancia en toda sabiduría, enseñándoos y exhortándoos los unos á los otros con salmos é himnos y canciones espirituales, con gracia cantando en vuestros corazones al Señor.”
Todo lo que hacemos en palabra y en hecho, tenemos que hacerlo para Él. Necesitamos adorarle a Él, Necesitamos alabarlo a Él, darle a Él las gracias por todo lo que Él ha hecho por nosotros. Sí, es muy importante para nosotros adorar a Di-s y agradecerle a Él por todas las tantas cosas que Él ha hecho por nosotros.
Siguiendo, necesitamos tener compañerismo. Sabes, 1ª Corintios capítulo 15, dice en el versículo 33 que la mala compañía corrompe la buena costumbre. Por lo que debemos tener mucho cuidado con las personas que están a nuestro alrededor.
Sé que recibimos muchas preguntas de personas durante este tiempo debido a la situación de Covid, acerca de muchas congregaciones que cada vez están menos atadas a la Palabra de Di-s y el engaño o decepción que está pasando. “¿Necesito realmente ir a una congregación? ¿Puedo quedarme en casa y adorar a Di-s yo solo o sola?” Sabemos que hay situaciones en las que tal vez alguien necesita hacer eso, al menos por un corto plazo, pero necesitamos tener compañerismo, necesitamos estar con otros creyentes.
Aquí hay un gran pasaje de la Escritura y es un poco largo, pero es muy apropiado. Hechos capítulo 2. Me encanta el libro de Hechos, sólo para aprender cómo el primer cuerpo de creyentes funcionó y participó como una comunidad. Es realmente un libro importante de la Biblia. Todos ellos lo son, sí, pero el libro de Hechos me ayuda, realmente, con un montón de información. Así que, en Hechos capítulo 2 y comenzando con el versículo 42 dice,
“perseveraban en la doctrina de los apóstoles, y en la comunión, y en el partimiento del pan, y en las oraciones. (43) Y toda persona tenía temor: y muchas maravillas y señales eran hechas por los apóstoles. (44) Y todos los que creían estaban juntos ; y tenían todas las cosas comunes; (45) Y vendían las posesiones, y las haciendas, y repartíanlas á todos, como cada uno había menester. (46) Y perseverando unánimes cada día en el templo, y partiendo el pan en las casas, comían juntos con alegría y con sencillez de corazón, (47) Alabando á Dios, y teniendo gracia con todo el pueblo. Y el Señor añadía cada día á la iglesia los que habían de ser salvos”
¡Que porción tan alentadora de la Escritura! Es tan importante estar orando unos con otros, animándonos unos a otros, apoyándonos unos a otros.
Y en Santiago capítulo 5 y versículo 16 habla de,
“Confesaos vuestras faltas unos á otros, y rogad los unos por los otros, para que seáis sanos; la oración del justo, obrando eficazmente, puede mucho.”
Entonces, es muy importante para nosotros no descuidar el reunirnos juntos con otros que tienen ideas afines. Puede ser que ustedes no estén de acuerdo en todos los aspectos. Muy pocas personas encuentran un acuerdo total entre sí, pero sin duda se puede encontrar algunos compañeros creyentes para reunirse juntos y animarse y orar por los demás y crecer en el Señ-r, crecer espiritualmente.
Otra cosa que tenemos que hacer es que necesitamos huir del pecado. La Biblia dice que debemos ser santos, porque Di-s es santo. Dice,
“Huye también los deseos juveniles; y sigue la justicia, la fe, la caridad, la paz, con los que invocan al Señor de puro corazón.” Esto está en 2ª de Timoteo, capítulo 2.
1ª Corintios 10;13 dice: “No os ha tomado tentación, sino humana: mas fiel es Dios, que no os dejará ser tentados más de lo que podéis llevar; antes dará también juntamente con la tentación la salida, para que podáis aguantar.”
Nosotros necesitamos huir del pecado. No es necesario mostrar nuestra fuerza espiritual y estar rodeados de tentación. Debemos huir. Necesitamos poner límites donde sea necesario, pero no debemos simplemente seguir estando rodeados de pecado cuando hay una manera de que nos alejemos de este.
Lo próximo es que debemos que decirle ‘no’ al pecado y ‘sí’ a Di-s y debemos caminar en el Espíritu. Tenemos el Espíritu Santo viviendo dentro de nosotros para ministrarnos, para consolarnos, para darnos dirección y guía. No hay ninguna razón por la que no deberíamos estar utilizando ese poder que está dentro de nosotros y que Di-s nos ha dado para clamar ante Él. Nosotros tenemos una línea directa de comunicación con Di-s.
Hay un mediador entre Di-s y el hombre y ese es Mesías Yeshúa, por fe en Él y el Espíritu de Di-s que vive dentro de nosotros.
En Gálatas capítulo 5 versículos 25 y 26 leemos, “Si vivimos en el Espíritu, andemos también en el Espíritu. (26) No seamos codiciosos de vana gloria, irritando los unos á los otros, envidiándose los unos á los otros.”
Si vamos a crecer espiritualmente y si estamos creciendo espiritualmente, nuestro comportamiento debe cambiar. La gente debe ser capaz de ver nuestro amor, nuestra unidad, nuestra compasión y no ver conflictos, envidia, y esa naturaleza negativa pecaminosa.
Finalmente, tenemos que estar preparados para los ataques del enemigo. Encontramos en Efesios capítulo 6 y comenzando en el versículo 10,
“Por lo demás, hermanos míos, confortaos en el Señor, y en la potencia de su fortaleza. (11) Vestíos de toda la armadura de Dios, para que podáis estar firmes contra las asechanzas del diablo. (12) Porque no tenemos lucha contra sangre y carne; sino contra principados, contra potestades, contra señores del mundo, gobernadores de estas tinieblas, contra malicias espirituales en los aires. (13) Por tanto, tomad toda la armadura de Dios, para que podáis resistir en el día malo, y estar firmes, habiendo acabado todo.”
Por lo tanto, Di-s nos da todo lo que necesitamos para ser victoriosos en Él. Entonces, confiemos en Él mediante el uso de todo loque tenemos disponible, ya sea la oración o el Espíritu Santo dentro de nosotros o estando la Palabra de Di-s, y yo les puedo decir basado en mi experiencia personal, que es imposible crecer espiritualmente a menos que estén en la Palabra de Di-s.
Necesitamos estar en la Palabra todos los días, estudiándola. Y es muy agradable cuando lo haces de una manera algo metódica, ya sea que tengas un programa de lectura a través del Antiguo Testamento primero y luego el Nuevo Testamento. Uno justo después del otro o que tengas una lectura del Antiguo Testamento y una lectura del Nuevo Testamento cada día o que estudies un libro bíblico, tal vez con Baruch, mi esposo, en loveisreal.org. Pero necesitas estudiar toda la Palabra de Di-s. Él se comunica con nosotros a través de Su Palabra. Él nos da revelación. Él pone ante nosotros cuáles son Sus planes, y Él nos da información sobre el futuro, el Tiempo del Fin que se aproxima. Él nos da tranquilidad. Él nos da fuerza, paz, conocimiento, y sabiduría. Todas esas cosas Él nos da a través de Su Palabra y la oración.
Por lo que te animaría, a medida que fortaleces tu fuerza física, a medida que fortaleces tu mente y eres cuidadoso con lo que piensas, por favor pasa tiempo en la Palabra, orando, estando en unidad con otros creyentes, y huyendo del pecado y verás crecimiento espiritual, gran crecimiento espiritual en tu vida.
Muchísimas gracias por unirse junto a mí hoy desde Eilat. Hasta la próxima vez, y que tengan un bendecido día.